lunes, 27 de agosto de 2012

Escenario

"Remesas" 

Por. Rafael Victorio Ruiz

Chiapas ya se ubica entre los estados con mayor número de migrantes en Estados Unidos; cifras del Instituto Nacional de Geografía e Informática (Inegi) y de autoridades gubernamentales indican que en la nación vecina del norte viven más de 300 mil chiapanecos, pero se calcula que anualmente unos 40 mil abandonan sus lugares de origen para ir en busca del "sueño americano", pero de ellos casi la mitad son detenidos y deportados. Es una realidad poco tratada y vista, porque la gran mayoría se va en busca de mejores condiciones de vida, de empleo y ganar billetes verdes para poder ayudar a sus familias. 

Esos migrantes ya se han convertido en una de las principales fuentes de ingresos para el estado, al enviar remesas económicas superiores a los 583 millones de dólares, superando a las exportaciones de café, dinero que es utilizado por las familias de los migrantes para su sostenimiento diario y muy pocos logran construir o adquirir algún bien para cuando regresen, si es que vuelven. Para especialistas e investigadores el tema de la migración de chiapanecos es preocupante, al considerarse que hay comunidades en donde ya no quedan adultos jóvenes -hombres- y solamente se ven a adultos mayores, mujeres y niños. Se calcula que por lo menos de cada familia chiapaneca hay uno en la Unión Americana. 

Los chiapanecos en Estados Unidos están diseminados en todo el territorio, aunque solamente 62 mil se encuentran identificados mediante los Registros Consulares. Todos ellos representan una fuerza económica importante, tanto es que el 10 por ciento de lo que envían en remesas les queda a las empresas encargadas de ese proceso, lo cual resulta sumamente caro; pero sumado a ello, pocos son los proyectos instrumentados para beneficiar a sus familias aprovechando el potencial económico que representan para el estado. 

La Financiera Rural ya se dio cuenta de esa situación y por ello ha emprendido acciones en busca de que sus familiares puedan ser beneficiados con créditos para el impulso y desarrollo de proyectos productivos en sus comunidades generando fuentes de empleo para ellos mismos, aunque muy pocos están interesados, porque esa institución no ha servido al campo, es más, desde su creación después de la desaparición del Banco de Crédito Rural, el sector agrícola y pecuario no ha contado con financiamiento, aunque saben que los migrantes en Estados Unidos pueden ser buenos pagadores, si es que logran controlarles las remesas que envían mensualmente. 

En la actual administración federal a través de la Secretaría de Desarrollo Social se instrumentó un programa que denominaron 3por1, en donde por cada peso aportado por los migrantes la dependencia aportaba tres, precisamente para proyectos productivos, pero no fue así y en varios casos lo que hicieron fue algunos albergues con talleres, cuando en las comunidades lo que requieren es que los ayuden a producir mejor y que los capaciten en sus actividades permanentes, así como a comercializar sus productos y cosechas, pero además la vinculación la tienen que realizar los municipios pero éstos desconocen las reglas de operaciones que les permitan acceder a esas fuentes de recursos. 

Los estudios indican que Tapachula, Tuxtla Gutiérrez, San Juan Chamula, Motozintla, La Trinitaria, San Cristóbal de las Casas, Huixtla, Ocosingo, Frontera Comalapa y Comitán de Domínguez, ocupan los diez primeros lugares en expulsión de chiapanecos hacia Estados Unidos y la inmensa mayoría son hombres y mujeres del campo, en donde no han encontrado la forma adecuada para mejorar sus condiciones de vida y la tienen que buscar en otros lugares del país y en Estados Unidos que es el imán no solamente de los centroamericanos sino también de nuestros propios connacionales.

 Las autoridades saben de dónde son los migrantes, por tanto no tienen que buscarle mucho si quieren promover el desarrollo de las comunidades, porque lo que aportan ellos es fundamental para que no haya una mayor pobreza y marginación en Chiapas, sino que las remesas sirven para paliar en algo esa situación que afecta a miles de habitantes de nuestra entidad. 

A escena 

A poco más de un mes de que los ayuntamientos municipales entreguen a sus sucesores, la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) convocó a éstos a que paguen las deudas que tienen con ellos. Hay varios casos en donde los pendientes datan de hace varios meses a pesar de que ya se concluyeron las obras y están entregadas, lo cual preocupa a sus representantes, sin embargo, hay muchas empresas que no cumplen con la entrega de la documentación y por ese motivo los alcaldes tienen problemas de comprobación. Existen varios casos de esa naturaleza y también algunos constructores esperan el pago de deudas que quedaron desde las administraciones que concluyeron en el 2010... Desde hace varios años existe en México el Registro Único de Vivienda manejado por la Sedesol y que supuestamente sirve para regularizar los desarrollos urbanos de las ciudades y aprobar la ubicación de fraccionamientos, pero resulta que en Chiapas muchos de éstos han sido construidos en zonas de alto riesgo de inundaciones, como ocurre en Tapachula, en donde hasta conjuntos residenciales se autorizaron en las márgenes de ríos después del desastre provocado por el huracán "Stan" en octubre del 2005. Ojalá que ahora cumplan con las reglamentaciones... Al parecer por falta de recursos económicos las repatriaciones de centroamericanos detenidos en Chiapas se demora y consecuentemente en las últimas semanas en la Estación Migratoria Siglo XXI se han registrado una serie de manifestaciones de indocumentados quienes también se quejan de malos tratos y violaciones a sus derechos humanos, culpando de ello a la delegada del Instituto Nacional de Migración, María de las Mercedes Gómez Mont, quien ni suda ni se acongoja por esa situación, al gozar de protección al más alto nivel federal a pesar de las constantes aquejas y denuncias que pesan en su contra... Hasta la próxima.

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