miércoles, 5 de septiembre de 2012

Comentario Zeta

Gobierno Sabinista no le interesa lo del dengue

Por. Carlos Z. Cadena

Muy grave la situación del dengue en la Costa y el Soconusco, pero lo más grave es que poco le interesa a el gobernador Juan Sabines y a su secretario de Salud, el mitómano James Gómez, el fenómeno peligroso del dengue clásico y hemorrágico de esta frontera sur de México, donde no solamente se ha conformado una “tapadera oficial” de cifras de enfermos del dengue, lo que implica hasta una deshumanización, porque se trata de un problema de salud pública, sino que simplemente ya no les interesa si hay enfermos y muertos por esta enfermedad tropical, al grado de que ahora que se puso en marcha el operativo binacional entre México y Guatemala contra el dengue en el puente fronterizo de Suchiate, quien lo hizo a nombre de las autoridades mexicanas fue el jefe de la Jurisdicción Sanitaria VII Andrés Gerardo Espinoza.

Se trata de un operativo binacional de suma importancia entre ambos países, contemplado del 3 al 7 de septiembre y cuya meta es llevar acciones en al menos seis municipios fronterizos de lado mexicano, mientras que de la zona de Guatemala se tiene programado trabajar en 12 localidades; todo esto con una fuerza de trabajo de más de mil brigadistas, quienes realizarán acciones de control larvario, fumigación, descacharramiento y promoción de la salud. (sic)
Es un trabajo preventivo de ambos países cuya situación del dengue hemorrágico que es el que le ha quitado las vidas de muchas personas ha aumentado considerablemente en este límite fronterizo entre el país de águila y el quetzal, con el único cambio que en Guatemala sí se dice el número de fallecidos, mientras que aquí en el gobierno chiapaneco actual se oculta, un rubro que pone en entredicho la labor profesional de autoridades de Salud. Se pueden ocultar muchas cosas, pero menos en problema de la salud, porque lo mismo ocurre cada año con el problema de “marea roja” que también ha sido denunciado de peligroso para el ser humano, pero siempre se ha ocultado perversamente este tipo de informaciones como pretendiendo engañar a los chiapanecos y a los mexicanos que en Chiapas, no pasa absolutamente nada. Todo es un vergel. Los chiapanecos nunca se enferman. No se sabe si para justificar gastos o simplemente meterle mano a los presupuestos.
Y hacemos este comentario porque ya salió el boom noticioso de que muchos funcionarios estatales, por eso pedían el vuelo aéreo internacional de Tuxtla Gutiérrez a Houston, que es donde presuntamente están la “compradera local de departamentos” y ya no es Miami Florida. Ahora es común escuchar en grupo salen las familias de paseo, y a los tres días están regresando en un buen fin de semana. Por eso duele que haya ocultamientos oficiales, sobre todo cuando se trata de riesgos humanos. Aquí es donde se quieren los hechos de trabajo y no el palabrerío fácil. El problema del dengue en la frontera sur es grave y puede seguir matando.
Por eso en actos tan importantes oficiales se les debe dar el interés por encima de los eventos sociales o de concursos de belleza. Ya a los chiapanecos estamos hartos con lo que paso con Pablo Salazar. Ya basta de funciones públicas perversas y de componendas.
El mar se lleva panteón de Puerto Madero
Un claro ejemplo de que pudo haber está influyendo más el cambio climático en la playas de la Costa, es la forma en que ya llegaron las embravecidas olas del mar al Panteón Municipal de Puerto Madero, que ha empezado a “lavar” y a desenterrar ataúdes que alguna veces se los lleva enteros el agua salada, y otras veces afloran los cuerpos de los esqueletos y a veces hasta cuerpos en estado de descomposición, por eso en los últimos días personas originarias del lugar, han empezado a exhumar a sus muertos y llevarlos a enterrar a un lugar más adentro de donde ahora se ubica el camposanto.
El problema es que este tipo de “entierros” carece de absoluta estrategia sanitaria, además no hay una orden oficial para que se hagan este tipo de exhumaciones y llevarlas a otro lugar, lo que evidentemente implica un riesgo para la salud de la población. Según trascendió desde el surgimiento del huracán “Stan”, hubo un fenómeno donde el agua del mar empezó a meterse al Panteón local, sin embargo fue este año, que las olas marítimas se convirtieron en una maquina destructora del camposanto.
Es desgarrador ver las imágenes de los porteños que con preocupación buscan todas las formas para evitar que sus familiares muertos se los lleve el mar, por lo que urge que autoridades de salud estatal o municipal intervengan, porque se trata también una medida de salud pública, y hasta se habla de la urgente necesidad de construir otro panteón pero ya bien edificado con todas las reglas sanitarias, pero lo que no se puede negar son esas imágenes vivientes de como el mar se está llevando los ataúdes y hasta tumbas enteras de concretos que como papel se las llevan las aguas del Océano Pacífico.
Tan crispado se encuentra el mar, que hay otro problema al que no se le ha dado ningún interés público, que son las mismas playas de Puerto Madero, que este año donde el mar picado es más grave de lo que uno se imagina, ya que en los últimos 50 días, -julio y agosto- las corrientes marítimas han tragado completamente a bañistas, y es aquí donde alguien tiene que empezar a valorar qué tan confiable son algunas advertencias de lo riesgoso que es bañarse en esta temporada de lluvias. Sólo basta ver las páginas de la nota roja delos diarios y los ahogamientos de fines de semana son muy comunes.
Siempre la playa y las olas son motivo de peligro humano, pero cuando las corriente marítimas son más fuertes es urgente marcar el alto para concientizar a las personas. Hay muchas muertes de ahogamientos que lamentablemente las autoridades no informan nada, pero es necesario que se apliquen anuncios de advertencias para mucha gente que viene de afuera y que desconoce el movimiento de las corrientes, sobre todo que se meten después de haber ingerido alimentos o en estados inconvenientes. Urgen anuncios de advertencia.

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