CARREREANDO LA CHULETA

LA CÁRCEL ESTÁ DE MODA

Por Ronay González

Una de dos, o no se enteraba uno tan fácilmente, o efectivamente de hace algunos años para acá les ha dado por “fiscalizar minuciosamente” los pesos que manejan los ex gobernadores en sus periodos de gobierno y más de uno va a salir, o ya salió, raspado, y qué bueno, finalmente son delitos los que se comenten y deben castigarse, pero honestamente no creo que sea el mejor camino, porque finalmente esos estados, su gente, difícilmente va a salir de las deudas y problemas que se les quedan por el mal manejo de los dineros.

Quienes gobiernan finalmente se van, y si se llevaron lo suficiente, muy seguramente irán lejos; son los gobernados los que terminan pagando o sufriendo todas las consecuencias.

Algo debe de hacerse ya, para que no sigan pasando estas cosas, porque de nada sirve un monigote en la cárcel, en el mejor de los casos con alguna cuentilla cancelada, si no regresan todo, todo lo que se llevaron.

¿Qué no se supone que debería haber los mecanismos suficientes como para detectar esas “sorpresitas” a tiempo? ¿por qué en cosas tan “simples” como el pago de impuestos o las cuotas del Seguro Social, los que ostentan el poder sí ponen fechas fatales, aplican sanciones y persiguen a las personas que no cumplen?

Si no entregan las cuentas claras “en tiempo y forma”, que se les sancione, que se les retire del cargo y se les impida trabajar en gobierno, o que los “faltantes” se les vayan descontando de su salario, como a cualquier trabajador, hasta que se pague todo; formas habría, ellos mismos las utilizan contra los ciudadanos, así que lo único que hay que hacer es que se conviertan en mecanismos de dos vías: de ellos hacia nosotros y sobre todo de nosotros hacia ellos.

Porque con razón cualquiera quiere pasar por un cargo de esos, es tan simple como ostentar el poder y entonces sí, a malversar el dinero como se me dé la gana, gastármelo, invertir en mi propio beneficio, y llegada la hora (si es que llega), hacerme el mártir, negarlo todo, y “taparle el ojo al macho” con mi detención, pasar ahí guardadito, cuidado, protegido, unos meses, para luego salir como si nada, con el futuro resuelta para el resto de la vida, pues ¡vale la pena!

Ya no es suficiente, si seguimos así, vamos a tener las cárceles llenas de políticos, las arcas de la nación vacías y con eso definitivamente no podemos avanzar, sobre todo por lo segundo.

¿Realmente se resarce el daño? ¿obtenemos beneficios tangibles? Honestamente yo no he oído que en Coahuila se les condone algún impuesto o se haga alguna mega obra porque van a recuperar millones de las cuentas de Moreira? ¿verdad que no? Es más “circo para el pueblo” que otra cosa.

Así que mejor hay que tenerlos vigiladitos y presionar a los regidores, asesores, legisladores para que vigilen nuestro dinero, porque con nuestro pronto y expedito sistema de justicia, lo único que pasa es que cada vez más individuos quieren ser ellos los “intocables”, aunque tengan que aguantar algunas incomodidades en los espacios VIP de la cárcel, total, lo bailado y lo acumulado ¿quién se los quita?