miércoles, 8 de enero de 2014

Palestra


Cuentas claras
Por. Rodrigo Ramón Aquino 

Luego de dejar la coordinación del Grupo Parlamentario del Partido Verde Ecologista de México en la LXV Legislatura de Chiapas, muchos pronosticaron el aislamiento del diputado Emilio Salazar Farías y con ello una debacle en su propósito por llegar a la presidencia municipal de Tuxtla Gutiérrez, pero los días al pasar fueron develando los verdaderos designios del poder en turno: sin ser titular de ninguno de los dos órganos de gobierno interno del Congreso del Estado, Salazar ocupa prácticamente toda el ala derecha de Palacio Legislativo al ser titular de las dos más importantes comisiones en materia presupuestal: la de Hacienda y la de Vigilancia. El pan y el garrote de todos los municipios. La liberación o la cárcel para los funcionarios públicos. 

Luego de una actuación sospechosa de Ángel Córdova Toledo, al que tanto se acusó de encubrir a toda costa las irregularidades de la administración pasada, el papel que desempeñe Salazar Farías será visto con lupa, tendrá la gran presión social de la inconformidad, y con eso tendrá más que suficiente para pensarla dos veces antes de doblar las manitas. Pero le digo algo, tampoco lo necesita. Un hombre con doctorado y certificado por la Bolsa Mexicana de Valores, dueño de hoteles, de empresas y escuelas, sin problemas de paga, no tiene más interés que el político, y para tener capital en este rubro, sólo hay que hacer bien las cosas. 

Ágora 

Luego de siete días del XX aniversario del alzamiento armado en Chiapas, los textos en torno al movimiento rebelde siguen siendo convergentes. Como el de Pablo Trejo Pérez en el diario Rumbo de México que insiste en que las cosas están mal: 

Las causas que originaron el conflicto zapatista hace 20 años no se han resuelto: Chiapas es un territorio de pobreza, impunidad, criminalización. Lo que cambió es que se visibilizó el actor, se creó el sentido de dignidad indígena. Sin embargo, su reconocimiento social ha sido escaso. Han mejorado algunas cosas, pero no las que uno esperaría. Los indígenas siguen siendo el sector más atrasado, que vive en condiciones más difíciles. 

Pese a existir en Chiapas una Secretaría de Pueblos y Culturas Indígenas, ningún miembro de las etnias tzeltal, tzotzil, tojolabal o chol ocupa ahora un cargo en el Gobierno estatal y su presencia en el Congreso de la Unión es también escasa, por no decir nula. Las cifras oficiales marcan que 55 municipios del estado están dentro de la Cruzada Nacional contra el Hambre, que alberga 400 municipios. El programa social, sin embargo, no llega a las comunidades zapatistas por no cumplir los criterios que pide el Gobierno, como el pago de impuestos por la tierra. 

Según el Consejo Nacional de Población (Conapo), Chiapas es la segunda entidad con mayor grado de marginación, donde el 78.4 por ciento de la población vive en situación de pobreza. La Encuesta Estatal de Ingreso y Gastos de los Hogares 2011 establece que el promedio de hogares vive con seis mil 489 pesos mensuales (unos 500 dólares), la mitad que en el resto de México. Además, Chiapas tiene el índice más alto de analfabetismo, un 18 por ciento, el triple de la media nacional. 

Actualmente en Chiapas, el 15 por ciento de la totalidad de viviendas aún tiene piso de tierra –en 1990 el porcentaje se elevaba al 48.67 por ciento–. En estos 20 años, la pobreza ha aumentado en los municipios zapatistas: del 68.7 al 81.3 por ciento en San Andrés Larrainzar; del 56 al 66 por ciento en La Garrucha; del 67 al 72 por ciento en Morelia, según el Instituto Nacional de Desarrollo Social (Indesol). 

Corrillo 

La Comisión de Derechos Humanos de Chiapas informó que no ha sido consensuada en la legislatura local la propuesta “derecho al matrimonio sin discriminación por razón de preferencia sexual diferente”. El secretario ejecutivo, Diego Cadenas Gordillo, dijo que desde el 28 de noviembre pasado presentó el proyecto, que sugiere reformar y adicionar el Código Civil y de Procedimientos Civiles. Explicó que el documento lo entregó al presidente de la mesa directiva, Armando del Toro Guzmán, pero no lo han discutido.

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