lunes, 4 de agosto de 2014

Fichero Político


Plena desconfianza en el IEPC
Por. Angel Mario Ksheratto
¿Es, hasta ahora, el Instituto de Elecciones y Participación Ciudadana, confiable? No. Entre sus obligaciones está el vigilar que ningún aspirante a un cargo de elección popular, haga campaña antes de tiempo. En todo el estado, hay cientos de pretendientes en abierta campaña electoral, sin que sean debidamente amonestados y mucho menos, inhabilitados, precisamente, por infringir la ley electoral.

Al azar, van dos ejemplos de cómo, en el interior, hay precandidatos en descarado proselitismo: Jorge Humberto Molina Gómez, de Chiapa de Corzo y Roberto Ruiz, en La Concordia. En Tapachula, Huixtla, Motozintla, Villacorzo, Copainalá, Tonalá, Palenque, Tapilula, etcétera, etcétera, es el mismo caso.

Roberto Ruiz, es un caso francamente vergonzante. Todos los recursos para la asistencia social, son canalizados a su casa de campaña para ser repartidos bajo los ya clásicos condicionamientos. Éste no ha tenido reparo alguno en restringir la ayuda a quienes no están de acuerdo con su pretendida candidatura e incluso, ha emitido graves amenazas si no le favorecen.

Muchas comunidades de ese municipio, han dejado de percibir los recursos que les corresponden, debido a que han manifestado su inconformidad por las pretensiones de Ruiz y además, porque ideológicamente, están identificados con otras corrientes políticas. Esto, lógicamente, empieza a tener repercusiones sociales graves que, de no detenerse por la vía institucional, es decir, mediante la intervención del IEPC, podría generar enfrentamientos como ya empiezan a suceder en algunos otros municipios.

Al pretenso candidato de La Concordia, lo protege y utiliza, un viejo líder campesino que busca mantener el control caciquil de la zona: Germán Jiménez Gómez, quien a su vez, presiona al actual alcalde para que todos los programas sociales, los reparta, a su antojo, Roberto Ruiz. La campaña electoral en ese municipio, es abierta, insolente y retadora.

Jiménez Gómez es un sedicente “líder” campesino que llegó a ser millonario, mediante el robo de los recursos para el campo. Nadie en Chiapas desconoce su larga historia de desfalcos y tampoco es secreta la cadena de despojos e imposiciones en la Frailesca. Como en La Concordia, en otros municipios de esa región, ha impuesto alcaldes, regidores y diputados para seguir percibiendo los recursos para el campo.

En el caso de Chiapa de Corzo, Jorge Humberto Molina Gómez, también hace de las suyas, al grado que en algunas comunidades, ha puesto ya, lonas con la leyenda: “Jorge Humberto Molina Gómez, Presidente Municipal”. Parte de la ayuda en especie que entrega, también lleva esa leyenda. Y lo peor: en las comunidades chiapacorceñas, pide abiertamente el voto ciudadano.

Lo anterior, está estipulado con perfecta claridad en la Ley Electoral, como un delito cuya sanción es fulminante. Deben ser inhabilitados para cualquier cargo de elección popular. Molina Gómez, es hermano del actual alcalde de Chiapa de Corzo, Sergio David.

Éste último, ha permitido que su hermano haga y deshaga con los recursos públicos, además de ser el más ferviente promotor de Jorge Humberto para sucederle en el cargo, de tal manera que en todas las comunidades, condiciona la entrega de recursos públicos a favor de éste.

En ambos casos, el Instituto Electoral y Participación Ciudadana, debió haber actuado desde hace tiempo. Pero no lo ha querido hacer. Ya por incompetencia, por ineficacia, incapacidad, dolo o desconocimiento. Ello hace que desde ahora, la campaña intermedia que se avecina, esté sucia de origen y sea, por lo pronto, foco de sospechas y fuente de posibles y graves problemas sociales.

Porque, como ya he dicho líneas arriba, no sólo son éstos dos municipios; tampoco son solo aspirantes a alcaldes. Hay aspirantes a diputados federales y estatales que ya están en abierta campaña y nada se hace para arbitrar de buena forma un proceso que, de no controlarse a tiempo, podría salirse de cauce más temprano que tarde.

Hay además, otras instancias que fueron creadas para vigilar el buen uso de los recursos del pueblo. Éstas también deben investigar, por ejemplo, de dónde el aspirante a la alcaldía de La Concordia, saca dinero para repartir a manos llenas, a cambio de votos. O cómo hacen los hermanos Molina Gómez en Chiapa de Corzo para evadir la obligación constitucional de ayudar a las comunidades sin condicionar los apoyos.

La democracia, debe pasar, forzosamente, por el buen funcionamiento de las instituciones encargadas de vigilar los procesos electorales. Éstas tienen la obligación moral y constitucional de velar porque nadie violente las leyes. Hacerse los desentendidos, será tanto como convertirse en enemigos de la democracia y cómplices de una simulación que no queremos más en Chiapas. Ojalá actúen a tiempo. Ojalá.

Tarjetero

*** Que ya hay una “nueva corriente” de perredistas en Chiapas. Viendo las fotos, vemos que son los mismos que aplaudieron las atrocidades de Pablo Salazar y que luego se fueron de bruces con Juan Sabines y ahora, pretenden hacer un PRD verde-amarillo. Quien no conozca a Juan Pablo Zárate Izquierdo y sus compinches, que los compre. Éste, cuando anda sin teta presupuestal para exprimir, saluda a todo mundo; apenas le dan una chambita, se le sube el podercillo a la cabeza y desconoce hasta a su familia. Y en cuestiones ideológicas, ni se diga. Ha sido de todos los moles. Ni forma de creerles. *** En poder de Fichero Político hay una copia seria y muy profesional de la parte del Cañón del Sumidero que está siendo afectada por una calera y que, irresponsablemente, la SEMARNAT, se niega a clausurar. Tres son los grandes riesgos que se corren: el desplazamiento de las capas que conforman la pared del Cañón, el aceleramiento sísmico y la probable caída del puente “Belisario Domínguez”, que une a Tuxtla con ciudades como Chiapa de Corzo y San Cristóbal de las Casas. Según los expertos que realizaron el estudio geológico de ese lugar, las constantes detonaciones dentro de la calera (por cierto, dentro de la reserva ecológica protegida), están provocando que las paredes del Cañón se estén desplazando de noroeste a suroeste. Éstas, al estar dentro de la depresión central de Chiapas y, tectónicamente, ligadas a las cuatro más importantes placas tectónicas de la región (Cocos, Pacífico, Caribe y Americana), podrían incrementar la actividad sísmica en el centro de la entidad. Se está a tiempo de evitar una catástrofe de grandes proporciones. Muy a tiempo. *** Tuxtla y Tapachula, como zonas de guerra. Los hoyancos, por todos lados. Y los alcaldes, como si nada. Indiferentes al clamor popular. *** Luego nos leemos.

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