Palestra

Va, de nuez, el voto migrante
Rodrigo Ramón Aquino

Con la puesta en marcha del programa Vota Chiapaneco del IEPC, con el que se promueve el sufragio de chiapanecos en el extranjero para elegir al llamado diputado 41, los cuestionamientos sobre su pertinencia y funcionalidad resurgieron. Qué tanto representa y qué utilidad real tiene. No se trata sólo del capricho de un exgobernador que se aprovechó de la comunidad chiapaneca en el extranjero. Como es el caso de Rosbita Párker, real activista migrante en Utah, con muy buenas relaciones públicas con las autoridades gringas.

Los expertos en política han señalado que es un absurdo que los ciudadanos de una nación avecindados en otra voten para elegir autoridades de su país de origen. El argumento es muy claro, pero no por sencillo falto de contundencia: si son avecindados en otro territorio, se ciñen a las leyes y requerimientos de ese lugar. Se convierten en ciudadanos de otra nación sea legal o no su estancia.

No obstante, los consejeros electorales de Instituto de Elecciones y Participación Ciudadana justifican y promueven esta figura legislativa. Por ejemplo, la consejera Miroslava Abarca considera que la promoción del voto del diputado migrante es un llamado a la participación social y política y no sólo a la búsqueda del voto, pues fundamentalmente lo que se pretende es abrir espacios a ciudadanos con voluntad de incidir en la toma de decisiones.

Como se recordará en el 2012 se reformó la constitución chiapaneca y se estableció una nueva figura legislativa que atendiera las necesidades de los chiapanecos que se encuentran residiendo en el extranjero. El primer ejercicio se llevó a cabo exclusivamente en la Unión Americana y sólo participaron poco más de 500 chiapanecos. El gasto fue demasiado para los resultados. En esta segunda ocasión se pretende triplicar el número y se cuenta ahora con una segunda sede: Guatemala.

Los diputados chiapanecos decidieron mantener lo que al principio no parecía más que una ocurrencia, como muchas otras que tuvo el colocho que gobernó estas tierras. Pero es bueno saber que este tipo de modalidades no es exclusivo de Chiapas. Por ejemplo, este año Colima, Baja California Sur y Michoacán tendrán ejercicios similares. Estados que como el nuestro cada año abona cientos si no es que miles de sus hombres y mujeres a la filas de la migración.

Pero repetir debe obligar, necesariamente, a mejorar. El nuevo enfoque es con una visión de estado y de respeto a los derechos humanos. Negarles el derecho al voto a los que no son ciudadanos legales en el extranjero es discriminatorio y la discriminación niega el ejercicio igualitario de libertades, derechos y oportunidades.

En este sentido, al presentar la campaña arriba mencionada (que desplegará una intensa estrategia de información y promoción), la consejera Miroslava sostuvo que los migrantes son personas que se encuentran en situación de vulnerabilidad, que han dejado sus costumbres, sus pertenencias, sus familias.

“Por ello estamos presentando esta campaña con un enfoque de inclusión, pensando en los que menos tienen y lo que más lo necesitan; en las familias que se quedaron y por qué no decirlo, también en los y las chiapanecas exitosas que se encuentra fuera de nuestra entidad por cuestiones de trabajo o académicas. No importa la razón por la que un chiapaneco migra, todo el que se va deja atrás una familia, un pueblo, una cultura, partes esenciales de su identidad; por ello queremos enfatizar elementos de esas identidades, identidades colectivas para motivar a la gente a actuar votando, nuestro eslogan ‘vota por ti y por los tuyos’ es el reflejo de estos valores.”

Agora

Demagogia: No es propiamente una forma de gobierno y no constituye un régimen político sino que es una práctica política que se apoya en el sostén de las masas favoreciendo y estimulando sus aspiraciones irracionales y elementales y desviándolas de la real y consciente participación activa en la vida política (Diccionario de Política).

Corrillo

Por más que se anunciase un recibimiento ríspido, con marchas y reclamos, la novena visita del presidente Enrique Peña Nieto a Chiapas salió conforme a lo planeado. Es más, la clase política corrió a tomarse una “selfie” con el titular del Ejecutivo. Hasta Julión Álvarez, el cantante consentido del sexenio, no se resistió a la tentación y fue y echó foto. Lo chistoso de la visita fue la versión de que por llegar tarde, el Estado Mayor Presidencial, le negara el paso al secretario de Gobierno, Eduardo Ramírez Aguilar. En fin, que la realidad real es muy distinta a la realidad de la redes sociales, donde todo el tiempo suenan tambores de guerra.

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