jueves, 18 de julio de 2013

BRÚJULA POLÍTICA

POCH, Origen y destino: la agonía de una farsa. 

Por. Víctor M. Cruz Roquevmcruzroque@hotmail.com

El Partido Orgullo Chiapas fue concebido y proyectado a finales de abril y principios de mayo del 2011. Pero la criatura amorfa dio sus primeros pasos en las elecciones de julio del 2012, proceso en el que a pesar de todos los esfuerzos de sus promotores no se desarrolló como se esperaba aunque sí obtuvo algunas posiciones en presidencias municipales, cabildos y el Poder Legislativo estatal. Concebido por el doctor Nemesio Ponce Sánchez, utilizó todos los engranajes oficiales para su emersión en el escenario político estatal: facilidades extremas del Instituto de Elecciones y Participación Ciudadana, utilización de estructuras sociales como la agónica Asamblea de Barrios, funcionarios dispuestos a la farsa y la comparsa, pero sobre todo, la instrucción precisa de presentarse como una opción política “de izquierda moderna” con proyección transexenal para garantizar la estadía y vigencia de los principales miembros del clan sabinaco. La ínfula partidista pronto empezó a crecer al amparo de las decisiones autoritarias y de torceduras a la legalidad, ya que se le visualizaba como una extensión de sobrevivencia con pelambres de búsqueda de impunidad. 

Mención especial merecen las tres tristes damas se prestaron como precandidatas a la gubernatura: Guadalupe de la Cruz Palacios, Marvin Lorena Arriaga Córdova y Marcela Bonilla, siendo ésta última la que se sacó la rifa del tigre protagonizando vergonzante participación en la contienda electoral. Lo demás, ya es de su conocimiento conspicuo lector. 

¡Paso a la reina!

El 11 de agosto del año pasado, Alejandro Gamboa López y Jaime Culebro Guillén, entonces Secretario de Desarrollo y Participación Social y director general del Instituto de Comunicación Social respectivamente, acudieron a las oficinas del Partido Orgullo Chiapas para presentar su formal adhesión en calidad de militantes a ese Instituto Político. Apenas el 1 de julio previo a esta fecha, acababan de efectuarse las elecciones homologadas (federal y local). Iban en realidad en carácter de avanzada para allanarle el acceso a la señora María Isabel Aguilera Aburto, quien días después se convertiría en “Presidenta Honoraria” de ese adefesio partidista. El hasta entonces “líder” estatal Carlos Alberto Herrera Ruiz, harto domesticado desde que siguió como escuderillo al ex gobernador Juan Sabines Guerrero cuando éste era diputado local y el primero auxiliar de trámite de la Oficialía Mayor del Congreso Estatal, siguió al pie juntillas las instrucciones, por lo que convocó a la Cuarta Sesión del Consejo Político de ese mini partido para que “la señora” se convirtiera en cabezal del POCH con la promesa de que conduciría “una dirigencia de puertas abiertas para seguir fortaleciendo el empoderamiento ciudadano”. 

Eran días en que ya se percibía en el negruzco horizonte sabiniano lo que vendría después, por lo que las voces de la opinión pública se alzaron calificando el hecho como un intento de los aludidos para cobijarse de la tempestad que se avizoraba. Hasta ese momento, todos los mencionados gozaban de manera privilegiada de las delicias del poder en diversos espacios de la administración pública estatal. 

POCH: el estigma.

Derrumbado el mito y el mitote sabiniano, el POCH se convirtió en una sombra sin efectos de presencia pública y menos de carácter político, pues lo que antes fue motivo de pertenencia satisfactoria se convirtió en estigma de culpabilidad. Sus militantes se diluyeron y sus dirigentes se agazaparon, solo los herederos con algún cargo de representación popular se vieron imposibilitados a borrar de los accesos a sus oficinas el corazoncito rojo que les sirve de logotipo. Esa imposibilidad se entiende porque de hacerlo, perderían las canogías y privilegios de la jugosa chuleta monetaria que aún mastican con rictus amargo y los sinsabores de su procedencia. Aún así, les es imposible cortar el cordón umbilical que los une con el tenebroso pasado que los identifica. En esa condición se encuentran, por ejemplo, Mercedes Nolberida León Hernández, representante ante el IEyPC; los diputados Rhosbita López Aguino, Isabel Ancheita Palacios y Saín Cruz Trinidad, por mencionar algunos. Las prominencias han desaparecido del escenario, es el caso de la ex señorita de belleza Tlaxcala 1990, el ex arroz de todos los moles sabiniles Alejandro Gamboa López y el ex titular del ICOSO. Como en la cancioncilla fabulesca que alude a los renacuajos: “nadie sabe, nadie supo, nadie en su casa los vio pero todos escuchamos al sapito glo, glo, glo”

Adiós a la reina..

A finales de junio próximo pasado, se dio a conocer que la señora María Isabel Aguilera había decidido renunciar a la dirigencia del multicitado partido. Ante esta sorpresiva aunque esperada decisión, los demás integrantes del Comité Ejecutivo Estatal decidieron acatar los postulados de sus estatutos, mismos que establecen en su artículo 75, fracciones lX y XXI, que ante un suceso de esa naturaleza debía procederse a convocar al Consejo Político Estatal y nombrar a su nueva dirigencia—presidencia honoraria, le llamaban ellos—evento que se llevó a cabo el pasado 10 del presente, resultando electo el regidor plurinominal del Ayuntamiento de Tapachula Víctor Moguel Sánchez. 

En el marco de la programada sigilosamente como Décima Sesión Extraordinaria del CPE, el Secretario general del mismo diputado Saín Cruz Trinidad, fue el encargado de tomarle la protesta de ley al nuevo presidente, con la consigna de “buscar nuevos horizontes políticos a través de la democracia”, según se dio a conocer. 

Lo que viene para el POCH.

Los días subsecuentes al 8 de diciembre pasado, cuando por azares y gracias a la buenaventura de la constitucionalidad que nos rige, el emporio sabiniano tuvo que dejar el poder y consecuentemente la dama que dirigía el POCH también lo hizo de la presidencia del DIF Chiapas, la dirigencia formal de ese partido se convirtió en virtual, a distancia, mediante videoconferencias y llamadas telefónicas provenientes “de alguna parte del mundo”. Los densos nubarrones de inanición política se hicieron presentes y el POCH hizo ¡pongoch!. Insoportable la situación, la señora Aguilera presentó su renuncia y fue así como se procedió a escribir una nueva página en la historia de este esperpento político, al que los chiapanecos aún damos respiración directa por medio de nuestros impuestos y a través de las prerrogativas que les suministra el Instituto de Elecciones y Participación Ciudadana. 

Origen es destino, reza la siempre acertada sabiduría popular, y es el futuro que con toda seguridad le espera a esta especie de experimento concebido al calor de las atrofiadas fauces del autoritarismo. Los genes del POCH están podridos, viciados en su génesis, como semilla que solo floreció por las ínfulas y los caprichos de la maldición para los chiapanecos llamada Juan José Sabines Guerrero. 

EN CONCRETO. 

Con la novedad de que la Comisión Permanente del Congreso estatal, aprobó nuevos nombramientos de subsecretarios de Gobierno, nombramiento que recayeron en las siguientes designaciones: Patricia Conde Ruiz en la región Mezcalapa; Ramiro Avendaño Mazariegos en la IV de Los Llanos; Octavio Vázquez Ruiz en la VI Frailesca; Reynaldo Aguilar Martínez en la IX Itsmo Costa; Oscar Miguel Sánchez Alpuche en la XIV Tulijá Tseltal Chol y Jesús Esquinca en la XV Meseta comiteca tojolabal. 

Estos nuevos funcionarios, tienen la encomienda de sumar esfuerzos para concretar espacios de diálogo y concertación, así como de abonar a la paz y a la estabilidad política de la entidad, tal y como lo ha instruido el gobernador Manuel Velasco Coello. Los nuevos funcionarios deben tener en cuenta y así proceder, que hoy Chiapas transita por un nuevo escenario de civilidad propicia para el trabajo y el desarrollo sostenido. Se espera de ellos el mejor de sus esfuerzos y la más propicia de sus contribuciones por el bien de nuestra entidad.

APUNTES.

En la misma sesión de la Comisión Permanente, se aprobó un Punto de Acuerdo solicitado por la Fracción Parlamentaria del PAN, por el que se exhorta a la PROFECO y a la Comisión Federal de Telecomunicaciones “a fortalecer los procedimientos administrativos conducentes y aplicar las disposiciones jurídicas para revisar los contratos de prestación de servicios de las empresas de telefonía celular”. 

Es todo, gracias. 

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