Por. Carlos Z. Cadena
La detención del ex director nacional de Operación de la Comisión Federal de Electricidad, Néstor Moreno, muestra la clara descomposición administrativa que hay en esa dependencia federal, donde se confirmó no solamente el haberse llevado más de 35 millones de pesos, sino que existe la estafa del otorgamiento de contratos bajo la mesa en una institución mexicana que siempre ha sido acusada de corrupción desde sexenios atrás –gobernado el país por tricolores o azules- pero lamentablemente se tapa la podredumbre y la CFE, se vuelve impune con sus servidores corruptos, que han logrado conformar “hermandades” -estilo mafias- por la antigüedad laboral de sus trabajadores, sobre todo de la línea más alta donde se involucran los Superintendentes regionales o de determinada zona del país.
Hoy ese funcionario preso ya está libre en la calle, porque tenía una suspensión provisional de la orden de aprehensión. Y aquí no ha pasado absolutamente nada.
Desde que tenemos uso de razón donde es la CFE, IMSS y Pemex, se han dado casos de corrupción, pero jamás se logra detener a los funcionarios mayores de las dependencias, ingresaran por eventos como al que sucedió al kínder del ABC de Hermosillo, Sonora que ingreso a la cárcel un exdelegado estatal del IMSS, por el caso de los niños quemados en el incendio del kínder, pero jamás entran a la cárcel por un escenario de corrupción.
Nadie podrá desmentir que estas paraestatales de la estructura federal, son donde mayor quejas de componendas hay, pero gozan de tanta impunidad, que es por de donde el país pierde presupuestos millonarios. Siempre en estos lugares están los amigos del Presidente en turno.
Lo irónico es que el pueblo es que el paga los platos rotos, y lo estamos viviendo aquí en Chiapas, donde ahora en una actitud retadora y amenazante la CFE ordenó el corte del suministro en contra de los Ayuntamientos que presenten adeudos y con ello en varios municipios de la región se paralizaron las actividades administrativa, locales.
Según denuncias hechas ayer, se deja entrever que los alcaldes afectados, la paraestatal los está amenazando a que paguen de inmediato las facturas pendientes, aunque la mayoría de ellos son adeudos rezagados que quedaron de las administraciones pasadas.
Trascendió que uno por uno los presidentes municipales han sido llamados a “comparecer” ante funcionarios de la CFE, “quienes de manera déspota y arbitraria, les están dando un ultimátum para que se paguen los millones de pesos que debieron de cubrir los ex presidentes corruptos del pasado. (Sic-El Orbe).
En este espacio lo dijimos, que el alcalde de Huixtla, José Luis Laparra y el de Cacahoatán Jesús Milla, denunciaron hace meses y últimamente que los montos son tan altos que para poderlos liquidar tendrían que frenarse las obras y las inversiones sociales que se están haciendo para cumplir con los objetivos del milenio, como el combate con la pobreza extrema, la desnutrición, la salud y el analfabetismo.
Ayer otra vez las quejas volvieron a señalar, en el sentido de que las anteriores administraciones no solamente les heredaron a las actuales autoridades municipales, deudas por el consumo eléctrico, sino también facturas de servicio telefónico, proveedores, servicios contratados, laudos laborales y hasta por obras inconclusas.
El caso de la CFE, ya no es solamente afectar a las familias chiapanecas con las elevadas tarifas eléctricas, sino que ahora la amenaza es ir en contra de los ayuntamientos, donde otra vez indirectamente se golpea a la gente, porque al no haber energía eléctrica, los parques, o lugares de recreación se convierten en lugares especiales en favor de la delincuencia. Mientras que la impunidad priva al interior de la CFE con sus funcionarios federales, a los chiapanecos, los siguen sangrando por todos lados por parte de una paraestatal, ala que mucho le ha dado Chiapas con sus hidroeléctricas, pero tal parece que el pecado fue habernos decididos ser mexicanos por anexión y que curiosamente el próximo 14 de Septiembre se cumple un año más de que somos los chiapanecos orgullosamente mexicanos, porque así lo decidimos por voluntad propia, aunque la interrogante que siempre ha quedado en el aire es : ¿ Estaríamos en mejores condiciones los chiapanecos siendo Guatemaltecos cómo fue la otra proposición del plebiscito, que mexicanos?.
Propuesta panista: Pruebas de control
Hasta ahora no se sabe en que concluyó la propuesta legislativa, que hicieron los diputados del PAN, Carlos Avendaño Nagaya y Edi Morales Castellano, en una conferencia de prensa de los lunes hace dos semanas, donde informaron sobre la propuesta de su grupo parlamentario para que los candidatos a un puesto de elección popular se sometan a las pruebas de control de confianza. Los legisladores azules advirtieron que de ser aprobada la adición al artículo siete del Código de Elecciones y Participación Ciudadana, los ciudadanos tendrían más certidumbre de quienes son los que los gobernarían en un ayuntamiento o una diputación.
Trascendió en aquel lunes que los exámenes que se aplicarían a los candidatos según la propuesta Panista, que no deja de ser interesante y muy acorde a la nueva modernidad del quehacer político profesional, serían psicológicos, toxicológicos y poligráficos, y que los realizaría por el Centro Estatal de Control de Confianza Certificado, quien evaluaría a los políticos chiapanecos. La idea es que la decisión del voto, sea razonado y no se cometa yerros de selección, que después son arrepentimientos populares, porque sale cada candidato más mañoso y perverso, que los delincuentes comunes.
Inclusive de broma muchos colegas señalaron que sería importante de una vez conocer por parte de la ciudadanía si sus candidatos son bolos o mariguanos, o que si es “neuras” o “lo cochón”, escribió un periodista. Lo importante es que es una propuesta de avanzada que determina antes de asumir una encomienda pública el perfil del gobernante y en esto todo mundo estaría de acuerdo. Vamos a averiguar en qué quedo esta propuesta legislativa magnifica.
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