BRÚJULA POLÍTICA

López Fernández: los tufos de impunidad. 

Por. Víctor M. Cruz Roque
vmcruzroque@hotmail.com.

El nombramiento de Juan Carlos López Fernández como delegado de la Secretaría de Economía del gobierno federal en Chiapas, fue asimilada como una bofetada por parte de la opinión pública y la sociedad chiapaneca en general. Se trata de uno de los personeros del pasado inmediato, que su sola mención provoca nauseas por todo el daño causado a los chiapanecos por el grupo mafioso comandado por el ex gobernador Juan Sabines Guerrero. Fue uno de los consentidos por el ex mandatario estatal y su desempeño en la administración pública dejó un amargo sabor en los anales de la historia reciente de nuestro estado. 

Imposible hablar de él sin que se le relacione directamente con su promotor ahora radicado—se dice insistentemente—en Acapulco Guerrero. Y es que López Fernández fue el comodín de la gubernatura sabinista, que lo mismo se le ubicó en la representación del gobierno esttal en el Distrito Federal; en la entonces Coordinación de Comunicación Social, como diputado local en la LXlll Legislatura estatal, como diputado federal e incluso en el Instituto de Población y Ciudades Rurales (Ese mequetrefe invento que al igual que muchas decisiones caprichosas hoy están descobijadas y se descubren como inoperantes e inservibles)

JCLP, tufo sabinista. 

El tufo del neoperredista próximo a cumplir 48 años de edad y originario de la zona norte de la entidad, es imposible disociarlo con la corrupción que se enseñoreó en toda su magnitud en el sexenio pasado. 

Por eso ahora que el titular de la dependencia federal Idelfonso Guajardo Villarreal lo ha designado como su representante en Chiapas, lo menos que despierta tal nombramiento es asombro y lo más, repulsa y desaprobación generalizada. 

El protegido de Juan Sabines Guerrero, éste López Fernández, porta en su solapa el mismo estigma de otros tantos como Mauricio Perkins, Manuel Burgos García, Fernando Ribé Varela, Nemesio Ponce Sánchez, Ricardo Serrano Pino, Ernesto Gutiérrez Villanueva, Carlos J. Jiménez Bolaños Cacho, Antonio Gamboa López, Alejandro Gamboa López, Mayda Guerrero, Roberto Guerrero, Antonio Leonardo Castañón, Carlos Guerrero, Martín Álvarez, Claudio Perkins Cardozo, Isabel Aguilera, José María Aguilera, Jaime Culebro, Yassir Vázquez Hernández y muchos más que sometieron a nuestro estado en la más escandalosa crisis económica que se tenga memoria debido al bacanal de corrupción que prodigaron al amparo de sus ambiciones desmedidas.

Por eso ahora que López Fernández nuevamente resurge en un espacio de la administración pública federal, las heridas que resiente el pueblo chiapaneco vuelven a supurar desprecio e animadversión difícil de asimilarlo. El cordón umbilical político que une al nuevo delegado de la Secretaría de Economía en Chiapas crea desasosiego y repulsa, tal y como se constata en los registros de los medios de comunicación. Y como corolario de la desfachatez y el cinismo, el evento donde fue ungido se llevó a cabo en uno de los hoteles más exclusivos de la ciudad, lo cual genera un negro panorama de qué es lo que nos espera con tales cartas de presentación. 

En términos políticos y sociales, los que vive Chiapas no son los mejores momentos para que se presente un emisario del pasado con esos antecedentes que a manera de prendas ignominiosas nos haga recordar que éste—Juan Carlos López Fernández-- es un eslabón de la cadena criminal que sometió las expectativas de Chiapas y de los chiapanecos a una vida más digna y de mayores oportunidades de desarrollo para todos. 

EN CONCRETO.

A manera de editorial.

El oleaje de especulaciones que se han comenzado a esparcir en los últimos días son dañinos y atentatorios contra el sosiego, la paz y la tranquilidad del estado. A nadie beneficia que los propagadores de insidias se dediquen a crear halos de rumores con propósitos aún no definidos pero que seguramente esconden intereses personales o de grupos que hacen todo manos sumarse al trabajo efectivo y al tránsito que vive Chiapas hacia su desarrollo.

Desde todos los frentes han surgido versiones que en nada contribuyen a la unidad que necesitamos para seguir avanzando hacia mejores estadios de vida que todos merecemos y necesitamos hoy más que nunca.

Obviamente no los repetimos aquí para no seguir abonando sus propósitos, pero las insidias que se han dejado escuchar se están propalando irresponsablemente, por lo que se hace necesario llamar a todos los ciudadanos bien intencionados y de buena fe, para que no sumen estas asperezas fantasmagóricas que conculcan nuestros derechos como sociedad organizada y en pleno goce de la constitucionalidad que nos rige.

Cierto, es innegable que existe un problema en donde participan algunos maestros que se encuentran radicalizados desoyendo los llamados al diálogo que les han hecho las autoridades estatales, pero de eso a que se haya contaminado completamente el ambiente político estatal, es otra cosa muy diferente.

Chiapas posee instituciones fuertes que están trabajando con toda su capacidad, por lo que no es el momento de intentar crear escenarios de ingobernabilidad porque de ninguna manera corresponden a la realidad. Chiapas está de pié, con la fortaleza y generosidad que siempre le ha caracterizado.

A los promotores de de rumores, vengan de donde vengan, bien les haría sembrar en lo más profundo de su ser, un poco mas de amor a Chiapas, por el bien de las actuales y de las futuras generaciones, por el bien de todas y de todos los chiapanecos. 

APUNTES.

Mujeres en política: 
60 años después. 

Al cumplirse el sexagésimo aniversario de la permisión y validación constitucional del voto femenino en los procesos electorales de nuestro país, diversos voces se han pronunciado a favor de este logro democrático. Las instancias y organismo electorales se pronunciaron y exaltaron la conveniencia de fortalecer la participación de las mujeres en la vida política, económica, social y cultural de nuestro país. 

El día de hoy se cumplen 60 años de que por primera vez se institucionalizó la participación de este sector social, aunque ya había antecedentes de inclusión en ejercicios electivos que no gozaban de reconocimiento jurídico. 

Hoy 60 años después de este suceso importante y trascendente para la vida nacional, los registros son alentadores: 5 mujeres han sido postuladas a la presidencia de la República; 6 han sido gobernadoras; en el Congreso de la Unión 44 de las 128 senadurías son mujeres y 187 de las 500 diputaciones federales son ocupadas por ese género, mientras que en el gabinete presidencial tres son titulares de secretarias. 

En el ámbito partidista, el PRI ha tenido cuatro dirigentes nacionales mujeres; el PRD dos y el PAN ninguna, y esta condición del partido conservador se explica por su cerrada concepción ideológica.

A este respecto, el presidente de la República Enrique Peña Nieto planteó recientemente, que lo idóneo es que los partidos políticos reserven el 50% de sus espacios y candidaturas a cargos de elección popular, federal y en los estados, sean para las mujeres, lo cual fue bien recibido por los institutos políticos y por la sociedad. 

Por su parte, el Senador Roberto Albores Gleasón, se pronunció porque se generen más oportunidades de participación en condiciones de igualdad de géneros. 

El legislador del Partido Revolucionario Institucional, destacó que es muy alentador que en Chiapas, en la administración actual de Manuel Velasco Coello, el sector social de las mujeres es prioritario para la elaboración de políticas públicas de beneficio a la sociedad. 

En el mismo tenor se realizaron actos y pronunciamientos por parte de la Junta Local del IFE en Chiapas así como del Instituto de Elecciones y Participación Ciudadana, además de la Sexagésima Quinta Legislatura del Congreso estatal. 

Agresión magisterial.

Va nuestra solidaridad para los reporteros Fátima Monterrosa y Víctor Olvera, quienes ayer fueron agredidos, golpeados, humillados y despojados de sus herramientas de trabajo por parte de un grupo de torvos maestros quienes sometieron a los comunicadores en el tramo carretero Tuxtla Gutiérrez-Chiapa de Corzo. La afrenta que sufrieron los corresponsales de un popular programa de la televisión nacional, se suma a otros incidentes que han padecido otros comunicadores de medios locales. 

Es todo, gracias.