CARREREANDO LA CHULETA

LOS “NADIE”
Por Ronay González

Ese Marcos ya se cambió el nombre, “quesque” ahora se llama el subcomandante Galeano. La economía no crecerá como se esperaba, de hecho ni al tres llegaremos. El gordo más gordo del mundo murió. Kim Kardashian se casó (¿eh?)…

Todo esto ha sucedido en las últimas horas, pero a la gente común, a la clase trabajadora, a los “nadie” esto no les importa.

Son los “nadie”, porque no hay quien se preocupe por ellos, por nosotros, a los que no se nos pide permiso para hacer declaraciones temerarias, nunca nos preguntan ni les interesa lo que pensamos.

A los “nadie” nos gustan y motivan frases como: “¿Quién tiene que pedir perdón y quién puede otorgarlo? ¿Los que, durante años y años, se sentaron ante una mesa llena y se saciaron mientras con nosotros se sentaba la muerte, tan cotidiana, tan nuestra que acabamos por dejar de tenerle miedo? ¿Los que nos llenaron las bolsas y el alma de declaraciones y promesas? ¿Los muertos, nuestros muertos, tan mortalmente muertos de muerte "natural", es decir, de sarampión, tosferina, dengue, cólera, tifoidea, mononucleosis, tétanos, pulmonía, paludismo y otras lindezas gastrointestinales y pulmonares? ¿Nuestros muertos, tan mayoritariamente muertos, tan democráticamente muertos de pena porque nadie hacía nada, porque todos los muertos, nuestros muertos, se iban así nomás, sin que nadie llevara la cuenta, sin que nadie dijera, por fin, el ¡YA BASTA!, que devolviera a esas muertes su sentido, sin que nadie pidiera a los muertos de siempre, nuestros muertos, que regresaran a morir otra vez pero ahora para vivir? ¿Los que nos negaron el derecho y don de nuestras gentes de gobernar y gobernarnos?”

Nos sentimos identificados porque a los “nadie” no nos toman en cuenta ni para lo que se “hace” y menos para lo que se deja de hacer en este país.

Y pareciera que no nos preocupa lo que pasa, que es nulo nuestro interés por lo que puede llegar a suceder, pero no es eso, es la impotencia de que nuestra voz no se escuche; sin embargo somos los que nos preocupamos por los problemas que aquejan a este país, a lo que se les va el sueño por las “reformas”, los que nos tronamos los dedos y nos comemos las uñas por las decisiones económicas que se toman, las alzas, si no es a las colegiaturas, es a la gasolina, la luz… los que nos espantamos con la violencia porque la sufrimos; los que nos estremecemos ante el peligro.

A pesar de todo esto, muchos “nadie” como yo estamos deseosos de participar, soy parte de una sociedad que sigue esperando el cambio y que está dispuesto a trabajar si se comienza a construir, pero estamos divididos, no sé ni cómo ni a qué hora nos separamos como pueblo y he aquí las consecuencias.

Vivimos inmersos en la violencia, el racismo, desde los pequeños en las escuelas, en el trabajo, hacia las mujeres, los adultos mayores, los que piensan diferente, pareciera que estamos en una continua guerra de los unos contra los otros.

Quiero pensar que estamos a punto de despertar, somos muchos los “nadie” de este país. Ya va siendo hora de que seamos ALGUIEN. ¿No cree?