Por. Angel Mario Ksheratto
La intención es buena; loable el intento. Pero faltan los factores seriedad, certidumbre y excelencia académica. En el tianguis de universidades y escuelas “especializadas” montado en el paraninfo
del Congreso del Estado, hace una semana, usted pudo haber encontrado las más insólitas carreras; desde cátedras de danzas exóticas hasta especialidades en golf, pasando por repostería, criminología, ¡vaya, lo que se le antoje.
La gran pregunta es: ¿Son confiables tantas universidades participantes? ¿Cuentan con los estándares de calidad? ¿Están avaladas por la Secretaría de Educación? ¿Sus egresados salen como todos unos expertos o, por el contrario, salen sin el mínimo conocimiento de la carrera que escogen? ¿Cuántas son en realidad “universidades” serias y cuántas son de las conocidas como “patito”?
El problema de la educación en México, se refleja en el excedente de universidades y presuntas universidades. Y empieza justamente en las instituciones educativas provenientes del Estado mismo. Esa enorme cantidad de escuelas y universidades, en realidad ponen al descubierto un problema mayor y de fondo: el descontrol educativo en el país, especialmente en Chiapas, donde la Secretaría de Educación, ha omitido su responsabilidad y en cambio, ha privilegiado viejas prácticas que solo afectan a los estudiantes.
El cúmulo de irregularidades que Ricardo Aguilar Gordillo y la camarilla de rufianes que lo acompañan, comete al amparo del poder y a espaldas del gobernador Sabines Guerrero —quien les ha dado toda su confianza, misma que, evidentemente, están traicionando—, es sencillamente, enorme.
Un botón de muestra es el caso de Yanuario Castellanos Tadeo, quien con la anuencia del secretario Aguilar y sus más cercanos colaboradores, impuso a su papá como delegado de esa dependencia en Pichucalco, gozando de un sobresueldo de escándalo. No contento con la imposición de su progenitor, Castellanos Tadeo —de triste memoria en la Secretaría de Agricultura donde también hizo de las suyas como talabosques ilegal y como proveedor de licencias al margen de la ley—, ordeno que a su hermana, Nora Esmirna Castellanos Tadeo, le otorgasen una plaza de tiempo completo, aún cuando no reunía los requisitos obligatorios.
El mismo Ricardo Aguilar Gordillo —que, según fuentes acreditadas, sigue cobrando una prima salarial en el ISSSTE, donde fingió ser delegado—, ordenó la asignación de 40 horas a sus más cercanos colaboradores (secretario particular; al coordinador ejecutivo, Eduardo Campos y a Rubén Ortega Amparán, director de materiales y al mismo Yanuario Castellanos) quienes jamás se han parado ante un grupo de estudiantes de secundaria. Con todo y que cobran esas 40 horas de clases no impartidas, gozan de un sueldo estratosférico en la Secretaría, además de primas vacacionales exorbitantes, compensaciones, viáticos y pagos extraordinarios.
Pero no todo es miel sobre hojuelas entre la pandilla de pseudofuncionarios que dirige Aguilar Gordillo; el pleito surgió recientemente porque Armando Rojas, uno de los más corruptos del grupo, descubrió que un maestro de apellido Moguel, robaba parte de las plazas que vendían y que, según el escalafón en la mafia administrativa, pertenecía a Yanuario. Y es que ante la permanente ausencia de Aguilar Gordillo en sus oficinas, Armando Rojas es quien hace y deshace en esa secretaría.
Por si fuera poco, esposas, amantes, novias, comadritas “especiales” y otro sinnúmero de mujeres “con derechos”, cobran en esa dependencia sin trabajar, por supuesto. Las famosas “aviadoras. La cadena de corrupción es enorme; en días posteriores, ampliaremos sobre el asunto; viene lo más grave.
Tarjetero
*** Todo listo para la gran función del circo legislativo; en lo que va del sexenio, fueron enemigos a muerte. Los perredistas bloquearon cualquier iniciativa de los panistas por considerarlas contrarias a sus intereses. Claro, nunca a los intereses del pueblo. Ayer anunciaron que PAN y PRD, formarán una barrera para bloquear todas las iniciativas del PRI en el Congreso de la Unión. De nuevo, los intereses de grupo anteponiéndose al interés público.
No es algo que deba sorprendernos. Es su modus vivendis. Son, por desgracia, los parásitos que debemos mantener. Para ellos, la dignidad, no existe y el pueblo, es solo moneda de cambio. *** La juventud, prioridad del gobernador electo, Manuel Velasco Coello. En ocasión de la celebración del Día de la Juventud, hace unos días, el próximo mandatario de Chiapas, dijo que enfocará todos sus esfuerzos a favor de los muchachos. El objetivo es a todas luces, plausible; no comparto la idea que los jóvenes son el futuro de Chiapas. Queramos o no, son el presente. He ahí las pruebas: Juan Sabines Guerrero, un joven comprometido con sus ideas y el bienestar de los chiapanecos. El mismo Manuel Velasco, un joven protagonista de la historia real y viva que tenemos enfrente. Y con ellos, cientos de jóvenes que están trabajando por Chiapas; no son perfectos, desde luego. Sus yerros cometen. Pero son jóvenes y no son futuro, sino un presente concomitante con las aspiraciones del resto de ciudadanos, sean éstos de la edad que sean. De ahí la importancia del plan de Velasco Coello: darle a los jóvenes, oportunidades reales, no solo de superación personal, sino de participación activa en los quehaceres públicos, desde donde podrán demostrar que la juventud, no es un momento en la vida, sino una acción permanente, de resultados para siempre. *** A comuneros de Yajalón, les robaron en sus propias narices; incluso, fueron partícipes del despojo ordenado por Víctor Eduardo Méndez Pinacho, director de Obras Públicas de aquel municipio. En toda una triquiñuela llena de enredos, a los comuneros los utilizó la constructora “20 de Noviembre” para extraer tubería galvanizada, primero, con el engaño que era para cambiarla por otra de mejor calidad y durabilidad. Tarde se vinieron a enterar que esa misma tubería, el alcalde de Yajalón y su Secretario de Obras Públicas, habían vendido esa misma tubería al Ayuntamiento de Chilón. Obvio, a los habitantes de la colonia “Perseverancia”, donde se llevó a cabo el robo, no se les devolvió ni medio céntimo y claro, tampoco los tubos. Habrá qué pedir a la CONAGUA, una amplia explicación, pues ante los azorados comuneros, dijeron que eran órdenes superiores de esa dependencia. ¡Vaya alcalde más ladrón! *** Luego nos leemos.
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