Palestra

Apuesta que suma

Por. Rodrigo Ramón Aquino

“Soy una ciudadana comprometida”, atajó María Elena Orantes López a los compañeros de la prensa cuando le preguntaron si ella será la próxima secretaria de Gobierno de Chiapas.

La pregunta de gran interés periodístico se dio en el marco del festejo a las madres de Chiapas desde la ciudad de Comitán de Domínguez, lugar a donde la actual secretaria general de acuerdos del Partido Movimiento Ciudadano a nivel nacional y excandidata a la gubernatura por el Movimiento Progresista (PRD, PT y MC) acudió como una “amiga personal” del gobernador Manuel Velasco Coello, con quien coincidió en la diputación federal y la senaduría.

“Con María Elena fuimos diputados federales y senadores de la República juntos y ahí me tocó compartir con ella y ser miembro de la Comisión de Equidad de Género en el Senado, por eso me da mucho gusto que hoy estemos homenajeando a las madres, pero sobre todo que estemos juntos a favor de las mujeres de Comitán y todo el estado”, dijo el Ejecutivo, quien en campaña prometió hacer de ese sector una de las prioridades de su gobierno.

El acompañamiento de MEOL es un claro mensaje de unidad en un momento en que algunos grupos políticos parecieran apostarle más a las crisis que a la resolución de los problemas añejos y desatendidos del estado.

La suma y respaldo de la mujer política que obtuvo el segundo lugar en la elección de julio pasado da legitimidad y fortalece el inicio de una gestión gubernamental que tiene dos principales retos: sanear las finanzas de Chiapas y mantener un clima de paz y estabilidad para que los programas sociales tanto federales como estatales por fin den los resultados esperados y esto es: salir, sin más mentiras, de los primeros lugares de rezago.

“Es un honor y un gusto compartir este espacio con quien me ha brindado su amistad; Manuel y yo construimos desde el Senado temas importantes para Chiapas.”

De ser cierta su incorporación al gabinete de Velasco se estaría cumpliendo con la promesa de hacer de esta gestión un gobierno incluyente y de coalición, pero además se estaría poniendo a una mujer en la segunda posición de importancia, lo que no sólo sería bien visto sino que sumaría a buena parte de la población que apostó por el proyecto de izquierda que Orantes abanderó.

María Elena tiene otras virtudes: una cartilla limpia, sin vínculos con el peñismo (aunque cercana a Manlio Fabio) y el carácter equilibrado y conciliador de una mujer plena y madura. Una apuesta que sin duda suma.

Fin de ciclo

Luego de los enfrentamientos tanto en Venustiano Carranza como en Tila, habría que preguntarse: ¿también se evalúan los resultados del secretario de Gobierno de Chiapas, Noé Castañón León, para mantenerlo en el puesto? Si es así, como en el caso del ratificado Raciel López Salazar al frente de la Procuraduría General de Justicia de Chiapas, entonces pronto tendrá que haber un relevo en el puesto y en ello no tendrá razón de ser ninguna fobia de lealtades. Los resultados positivos tanto en la iniciativa privada como en gobierno son requisito fundamental para la permanencia.

De modo que ninguna campaña mediática negativa en contra del heredado funcionario habrá surtido efecto. No serán las demandas de los “opinadores” ni de los “asesores mediáticos” los que hagan caer a Castañón. Ni por descontado serán los sabios e insistentes “consejos” de los que se sienten cercanos al número uno los que lleven a la determinación de Palacio, si la hubiera. Lo que va a ocurrir, como en todo, es que el ciclo de un interlocutor más de gobierno termina. Así que nadie vaya a engañarse ni autoadjudicarse su caída.

Cotillo

Si María Elena no fuese designada secretaria de Gobierno, aún sería un gran activo para ocupar, por ejemplo, la Secretaría para el Desarrollo y Empoderamiento de las Mujeres, cuyo despacho aún está a cargo de Alejandra Peralta.

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