Pepe Figueroa

Café Avenida

Un carro que fue robado en la capital de Chiapas imposible que haya salido rodando de Tuxtla y ande en Los Altos de Chiapas donde muchos emplumados tienen de modus vivendis el robo de carros y no solo la siembra de mota o la piratería de discos y películas. En Tuxtla se experimentan robos a casas habitación, los asaltos callejeros, las contribuciones forzosas bajo promesa de muerte o de secuestro, se han disparado más alto que los precios del tomate que en las tiendas departamentales está casi a 25 pesos el kilo y el huevo a más de 30 pesos el cono y en número son más como más son día con día las cantinas donde venden caguama lo mismo a grandes que adolescentes sin que dejen de hacerlo un día de la semana y hasta altas horas de la noche como pasa en las tres o cuatro que funcionan enfrente de lo que se llamaba Junta Local de Caminos, cerca de oficinas y escuelas, o las que están en la 15 calle sur (entre 9ª y 13 sur) y regadas en todita la ciudad.

En algún taller mecánico o lugar tuvo que haber sido desarmado y a estas alturas habrán vendido ya algunas de sus piezas. No en vano han crecido y prosperado decenas de negocios que se dedican a la venta de refacciones usadas y que a diferencia del DF (donde cuestan no más de un cuarto de lo que vale una refacción usada) aquí sale arriba de la mitad, es más caro, pero eso tiene una explicación racional y empírica: en el DF se roban más carros que en la ciudad de Tuxtla. Total que a nuestro amigo le robaron su camionetita pick up blanca y es hora que no la hayan las súper policías que salen hasta en la tele con su cara de cochis en brama. No la hayan ni la hallarán dijera Don Teofilito. Ya habrán vendido el motor porque era del 2009 y las llantas porque estaban nuevecitas. Pero este caso no es el único, los robos de carros se han incrementando lo mismo que los delitos previamente dichos.

Los taxistas que nos vigilan

Hace unas lunas les dijimos cómo a un quesero secuestrado en la costa aparte de que le bajaron dos millones de pesos le robaron dos camionetas de lujo y como tenían chip para localizarlas por la computadora vía satelital, las localizaron al día siguiente en Poza Rica, pero ahí les perdieron la trilla porque seguramente les desmontaron el chip como al Diego Fernández de Cevallos se lo quitaron de una cuchillada en el brazo donde lo llevaba y todo indica que y está en casa. Hay mucha inseguridad en el país y ninguna entidad es ajena a ese crecimiento delictivo, claro, Dios nos proteja de que seamos Mataulipas o Juárez, pero la robazón está a plena luz del día y en el pleno centro a pesar de las camaritas y de los taxistas vigilantes que en muchos casos no tienen nexos con el crimen organizado pero en otros sí y la hacen de informantes, algunos de ellos están coludidos con ladrones de casas habitación y con asaltantes, como el que le dijimos siguió a una dama casi toda la mañana mientras robaban su casa y cuando comprobó el robo y mandó vigilar a un su cuñado que se dedica a la industria del robo de las casas habitación, ¡sorpresota!: en el taxi que la había seguido dos horas cargaban teles, equipos de sonidos, videos, microondas y otras madres allá por la orillada de la colonia Las Palmas. Obvio que no lo denunciaron el robo ni al cuñado, porque capaz que mata a la pobre mujer, pues antes de dedicarse al robo fue policía.

Pero repetimos, en varios estados del sur el agua no nos llega al cuello como en el DF, Nuevo León o Chihuahua, donde como en todo el país, como consecuencia de una mayor incidencia del crimen organizado, el robo de vehículos asegurados en México aumentó 15.7 por ciento de enero a septiembre de este año, al pasar de 49 mil 518 unidades sustraídas en el mismo periodo del año anterior, a 57 mil 341 automóviles este año. Datos duros de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS) indican que el Estado de México continúa siendo el primer lugar en este tipo de actos ilícitos con 12 mil 398 unidades, seguido del Distrito Federal con 10 mil 665; Nuevo León con 7 mil 166; Chihuahua, con 4 mil 604 y Jalisco con 4 mil 328. Juan Ignacio Gil Antón, presidente de la AMIS, expuso que los esfuerzos realizados por el gobierno federal en materia de combate a la delincuencia, han obligado a los maleantes a migrar a otro tipo de ilícitos como el robo de autos. “Las autoridades están preocupadas por el robo de vehículos, pues son herramienta de trabajo para la delincuencia organizada”, indicó el representante del sector asegurador.

¿Quién deja sin control a los deshuesaderos?

Por fortuna estos delitos del robo de vehículos han sufrido golpes severos pero nunca hemos visto que la policía realice operativos en los deshuesaderos para comprobar que no tienen nada que ver con ese floreciente negocito al cual este en años pasados elementos de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSyPC) le dieron un buen golpe al recuperar decenas de vehículos con reporte de robo y que fueron localizadas en los municipios de Tuxtla Gutiérrez, Comitán y San Cristóbal de Las Casas, por el grupo de Recuperación de Vehículos Robados e Irregulares. Antes le habían dado un golpe duro a la banda de narcos y roba carros que se mueve por Rincón Chamula. Así que de algo funcionan esos retenes o módulos de verificación instalados en las entradas y salidas de la capital del estado y de los municipios ubicados en la zona Norte y Altos, pues en esa ocasión el grupo especial de la SSyPC recuperó más de 35 autos de diferentes marcas y modelos, los cuales contaban con averiguaciones previas por el delito de robo e irregularidades en los medios de identificación, pues 13 fueron reportados como robados en esta aldea y dos por contar con irregularidades de identificación al ser clonadas las facturas; dos procedían de el estado de México, dos del Distrito Federal, uno en Jalisco, uno en Tabasco, uno más en Guanajuato y el mismo número en Puebla y Tlaxcala.

Es decir, Chiapas es líder en el mercado de carros robados y en otros estados. En esa actividad ilícita (lo mismo que en la trata de personas, trasiego de armas y municiones, narcotráfico, pollerismo, pedofilia, prostitución) mucho tiene que ver nuestra ubicación fronteriza porque en esta Frontera Sur aquí pasan cientos de carros a Guatemala, pero lo mismo traen carros robados de Guatemala, pues en esa ocasión del vecino país se recuperaron 11 unidades con averiguaciones previas por el delito de robo. Los vehículos recuperados fueron trasladados a la Unidad de Recuperación y Atención de Vehículos con Reporte de Robo de la entonces Fiscalía General del Estado que ahora de nuez es Procuraduría General del Estado y de ahí ya no supimos de esos carros que luego se quedan las madrinas, las novias, o desarman en los corralones.

Todos los carros robados

Todavía este año durante la primera quincena de junio los polis del estado le dieron otro su golpecito al hampa dedicada al robo de automotores, cuando elementos de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) detuvieron a tres sujetos que se dedicaban al robo y tráfico de vehículos, que conseguían en diversos estados del país y que ingresaban a Chiapas luego de alterar los números de serie y falsificar las facturas de compra. En esa ocasión los detenidos confesaron dedicarse a la comercialización de vehículos “clonados”, y haber ingresado en los últimos dos años hasta 200 vehículos con documentos apócrifos, mismos que eran vendidos en cantidades por debajo del 50 por ciento de su precio real aquí en Tuxtla lo mismo que en Comitán, San Cristóbal o Tapachula.

En ese exitoso operativo fueron detenidos Nicolás Alegría Fonseca (a) “El Ruso”, Henry Rocael Mérida de León y Óscar Alberto Luna Alor, a quienes les fueron asegurados cuatro vehículos con reporte de robo y fueron detenidos cuando intentaba vender un vehículo marca Mazda, color blanco, modelo 2010, con placas de circulación del estado de Chiapas, en 75 mil pesos, cuando su precio real en el mercado superaría los 280 mil pesos. Bueno que un cafetómano que anda su carrito todo jodido no lo vio porque confiado como es de que toda la gente es buena y moral como él se los hubiera arrebatado, pero el Mazda 2010 le hubiera caído como anillo al dedo porque el que anda ya está muy jodido.

El caco Óscar Alberto Luna Alor (que esperemos no haya salido con amparo, con una buena mordida y todavía esté en El Amate) confesó que su participación se daba solo en la venta de vehículos robados en uno de los muchos lotes de carros usados que hay en esta capirucha, carros que le eran proveídos por sus cómplices con quienes operaba en diversos municipios de Chiapas, tanto en los Altos, en el Norte, como en las Costa. Por su el Henry Rocael Mérida de León, igualmente aceptó su participación en los hechos delictivos, revelando que las unidades provenían, principalmente de Celaya, Guanajuato o el DF, es decir, nuestros ladrones chiapanecos no solo se joden a los aldeanos, están globalizando el negocio porque lo mismo exportan que importan de Guatemala, o del Norte del país.

El otro pájaro de cuentas, un tal Nicolás Alegría Fonseca (a) “El Ruso” que tiene apellido de “político”, igual confesó estar involucrado en la comercialización de estos vehículos, que le eran entregados por Henry Rocael Mérida de León.

Es pues el robo de autos un negocio altamente lucrativo como la venta de caguamas, de nalguitas centroamericanas, de drogas y bisnes que por ser frontera, Chiapas es un punto estratégico para esos y otros negocios, pues el tal Henry Rocael Mérida de León, no es aldeano, es un cerote originario de Guatemala; Nicolás Alegría Fonseca (a) “El Ruso”, ese sí que es del meritito municipio de Villaflores de Germán Jiménez (pos que se lo ponga ahora que es moda ponerle el nombre a las cosas); y el tal Óscar Alberto Luna Alor, tampoco era de la aldea sino nacido en el estado de Veracruz. Lo que llama la atención es la facilidad con la que Control Vehicular de la Secretaría de Hacienda les extiende los documentos oficiales (tenencia, tarjeta de circulación y todo) pues a pesar de ser carros robados el Mazda, color blanco, modelo 2010, estaba emplacado con placas de circulación del estado de Chiapas; un Volkswagen, tipo Jetta, color azul, modelo 2008, lo mismo traía placas de circulación del estado de Chiapas; el Chevrolet, tipo Camaro, en color rojo, modelo 1999, para lucir a la vieja y a las nuevas, lo mismo ostentaba placas de circulación del estado de Chiapas; una bonita Chevrolet, tipo Pick Up (Silverado) en color dorado, modelo 2003, pero en condiciones de apantallar a la indiada, esa no tenía placas de Chiapas, pues eran placas de circulación del estado de Guanajuato. Hasta donde sabemos, el hecho de que funcionarios o personal de Control Vehicular de la Secretaría de Hacienda esté legalizando carros robados, no causó averiguación previa alguna, no se investigó y mucho menos se detuvo a los que dentro de las oficinas pasan por buenas las facturas clonadas y legalizan los carros robados: eso y no otra cosa significa darles placas, tarjetas de circulación, tenencias, cambio de propietarios.

Impuestos de protección

Hay evidencia de que es un negocio que se realiza con participación (no sabemos si consciente, negligente u omisa) de funcionarios de la secretaría de hacienda del estado. ¿Qué están haciendo sobre ese asunto, donde pasan cientos de carros con placas de Chiapas? ¿Quiénes están haciéndose de mulas Pedro con ese negocio de pasar por bueno lo malo en Control Vehicular? Bien recordamos que con Julio Cesar Ruíz Ferro el entonces secretario Geovanni Zenteno Mijangos procesó y dio de baja a una bolita de truhanes de Control Vehicular, puso gentes reconocidamente honestas, mujeres en Tapachula, que era la plaza principal en el manejo de carros robados y ayudó a limpiar de corrupción esas áreas que al dar por liebres a los ratones son cómplices de los roba carros y permiten que el negocio crezca de manera más o menos impune porque siempre serán más los carros robados, que los recuperados. Por mucho tiempo en la costa los taxistas y transportistas traían unidades robadas pero blanqueadas y pintaditas como taxis o colectiveros de tal forma que uno ni se las olía que eran carros robados y no pocos policías judiciales, ministerios públicos, madrinas y hasta personajes sociales traían carros robados con papeles clonados.

Por cierto, ¿quién permite que el PRD a través de la UCD (Unión Campesina Democrática, la CNC de ellos) venda placas y cobre contribuciones para que cientos de chiapanecos puedan traer carros chocolates de los Estados Unidos? No se entiende cómo se permite a vivales que vendan esas placas que solo dicen UCD y tienen un número que si es progresivo quiere decir que cobran cuotas de protección (como Al Capone protegía a los taxistas, cantineros, transportistas y sindicatos) a los que de manera ilegal introducen carros robados o chocolates de los Estados Unidos, carros que no son para usos agrícolas como dicen porque andan en las ciudades y pueblos sin pagar impuestos, tenencia, emplacamientos, los que aquí son casi al doble de lo que los vende en el DF Marcelo Ebrard. ¿Es parte de la repartición del botín? No se entiende cómo una organización así pueda desplazar a las instituciones, dañar las finanzas públicas, las calles, los caminos, sin pagarle nada al Estado o a los gobiernos, pero sí a esta bola de apestosos ladrones del PRD que están vendiéndole protección a miles de gentes que no es que sean pobres o campesinos, ni madres, muchos tienen paga y no les da vergüenza traer la troca o la camionetona con aire acondicionado y todo con placas.